Mastromarino conquistó Buenos Aires - El atleta marplatense ganó el maratón porteño y además consiguió la exigente marca que lo clasificó para los Juegos Deportivos Panamericanos de Toronto 2015.
El marplatense Mariano Mastromarino con la bandera argentina.
El atleta marplatense Mariano Mastromarino, de 32 años y entrenado por Leonardo Malgor y Daniel Díaz, sorprendió ayer a la cátedra al ganar el maratón 42K de Buenos Aires, superando incluso a los corredores keniatas.
Además, el ganador, que empleó un registro de dos horas, 15 minutos y 28 segundos, obtuvo la exigente marca establecida por la IAAF (Asociación Internacional de Federaciones Atléticas) para poder clasificarse a los Juegos Deportivos Panamericanos de Toronto 2015.
Fue la primera victoria en esta prueba para un atleta argentino en diez años, luego de que Oscar Cortínez ganara en la edición 2004.
"Habíamos trazado el plan de correr los primeros 30 kilómetros a un ritmo tranquilo para después poder apretar en los últimos 12. Y por suerte salió bien, aunque sinceramente ni siquiera me imaginaba subir al podio. Se podría decir que me encontré a la victoria, porque en realidad nunca la fui a buscar", dijo Mastromarino tras consumar su espectacular triunfo.
Y abundó en esa explicación: "El objetivo era tratar de correr por debajo de las 2 horas y 16 minutos, una marca muy difícil que nos habían impuesto para clasificar a Toronto. Pero me encontré con los punteros sin esperarlo, me di cuenta de que no tenían buen ritmo y pude superarlos. No me olvido más de este maratón", afirmó.
Tras su emotivo festejo al cruzar la meta en el primer lugar y recibir la medalla y la necesaria hidratación, el marplatense se dirigió de inmediato a la valla de contención detrás de la cual se ubicaba el público. Allí lo esperaban su esposa Mariana y su hija Morena, verdaderos motores de su vida. No faltaron las lágrimas en ese encuentro que conmovió a todos.
"Ellas, el resto de mi familia y mis entrenadores son los grandes reponsables de que yo pueda hacer esto. Sin el apoyo de ellos sería imposible", reconoció, tras recordar la durísima pero necesaria preparación de 21 días en la altura de Cachi, Salta. "Me había quedado con las ganas de ir a los Juegos de Londres 2012, ya que por muy poquito no logré la marca mínima en 3.000 metros con obstáculos", dijo, y agregó que "ahora mi sueño, como el de cualquier atleta es poder concretar una participación en los Juegos Olímpicos. Voy a hacer todo lo que esté a mi alcance para estar en Río 2016", aseveró, no si antes confirmar que participará, el próximo 30 de noviembre, en el 25° Maratón Internacional 'Ciudad de Mar del Plata', ya que "en mi ciudad me brindan un gran apoyo y por eso quiero ser agradecido y correr. En alguna de las tres distancias (10K, 21K o 42K) voy a participar", prometió.
El maratón de Buenos Aires reunió a 10.335 corredores (nuevo récord de inscriptos), representantes de 55 países de todos los continentes. El 78% de los participantes fueron hombres, y el 22%, mujeres. Además, compitieron 2.535 corredores extranjeros y otros 635 extranjeros radicados en el país.
Después de superar la barrera de los 30 kilómetros, para muchos, el momento más determinante de una prueba de 42K, Mastromarino empezó a ver al alcance de su posición a los keniatas Julius Karinga y Peter Muasya, y entre los kilómetros 36 y 37 logró superar a ambos para llegar a la punta de la carrera, súper motivado y empujado por el apoyo de ciclistas y patinadores que seguían de cerca el desarrollo de la carrera y le aportaron energía extra al marplatense.
"La idea era mantener un ritmo de 3m16s para el kilómetro, pero me sentía muy bien y por momentos anduve más rápido que eso", dijo Mastromarino, aún incluso de acceder a los datos que registraron un promedio para toda la carrera de 3m12s por cada kilómetro recorrido, a una velocidad media de 18,680 km/h.
El registro de Mastromarino se transformó en el séptimo mejor tiempo para el ranking argentino de todos los tiempos, que lidera Antonio Silio, con 2h09m57, desde 1995.
Sus escoltas fueron los chilenos Leslie Encina y Christopher Guajardo, quienes cronometraron 2h18m42s y 2h18m43s, respectivamente.
Entre las mujeres, el atletismo argentino tuvo representación en el podio con el tercer puesto obtenido por la cordobesa Rosa Godoy (2h44m03s), quien además mejoró su registro personal sobre la distancia,
ascendiendo al undécimo puesto en el ranking nacional permanente. La keniata Lucy Karimi (2h38m53s) ganó por tercera vez consecutiva y la etíope Zeytuna Mude se clasificó segunda, con un tiempo de 2h39m16s.
Un error inconcebible que pudo costar caro
La anécdota terminó siendo graciosa, aunque pudo haberse convertido en un error irreparable. Sobre el kilómetro 30, después pudo verse claramente en las imágenes de la transmisión televisiva de ESPN, autoridades del Maratón de Buenos Aires pretendieron retirar de la competencia a Mastromarino.
El marplatense apareció amenazando el liderazgo de los atletas keniatas, y desde un auto blanco de la organización le avisaron a Mastromarino que debía "apartarse de la ruta del maratón para no molestar a los punteros", creyendo que se trataba de un intruso que se había infiltrado en la carrera.
Con gestos inequívocos, el marplatense se señalaba su número y trataba de convencer a los miembros de la organización de que era un participante legal.
Acaso sorprendidos porque los favoritos keniatas iban a ser superados por un argentino, no puede soslayarse que, tratándose de autoridades de una prueba atlética, es un papelón que no conocieran a un atleta que ha representado muchas veces al país como Mastromarino. "Por suerte, después les avisaron que yo estaba corriendo desde el principio y me dejaron continuar", recordó entre risas el marplatense.
Claro, en el momento, la situación no le causó ninguna gracia. Y la pérdida de ritmo pudo haberle costado muy cara.
Todo el apoyo para Jonás
El Maratón Internacional de Buenos Aires se largó a las 7.30 de ayer, desde Figueroa Alcorta y Monroe, y se corrió por los lugares más emblemáticos, históricos y simbólicos de la ciudad, entre ellos el Obelisco, el Cabildo, el Teatro Colón, la Plaza de Mayo, los Bosques de Palermo, La Boca, Puerto Madero y la Casa Rosada, cerrándose en el mismo lugar de la partida.
Un tramo de la prueba fue recorrido por el futbolista Jonás Gutiérrez, quien contribuyó a promocionar y resaltar el trabajo de la Fundación para la Investigación, Docencia y Prevención del Cáncer (FUCA).
El ex integrante del seleccionado argentino y que pasó por Vélez Sarsfield, Mallorca (España), Newcastle United y Norwich City (ambos de Inglaterra), se encuentra en pleno proceso de rehabilitación tras ser operado de un cáncer de testículo.
Bajo el hashtag #CorroConJonas, deportistas y participantes se unieron en esta movida para darle fuerza a Gutiérrez en su cruzada personal. Incluso, en el partido del sábado entre Argentina y Brasil, los jugadores "albicelestes" posaron en el campo con una bandera que tenía la inscripción "Fuerza Jonás".
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