lunes, 1 de abril de 2013

BOCA SE SACÓ LA MUFA


Boca Río Gallegos tiene un “Súper Mario” - Con dos goles de Mario Ávila a los 38 del primer tiempo y 34 del segundo, Boca Río Gallegos se sacó la “mufa” de siete partidos sin ganar, ante Germinal, por 2 a 1. Nelson Iberlucea había puesto en ventaja al Verde. Pero el festejo xeneize no pudo ser completo ya que a los 36´ del segundo tiempo el árbitro comodorense, Raúl Pagani, suspendió el partido por incidentes dentro del campo de juego.

Boca Río Gallegos enfrentó a Germinal de Rawson en el marco de la vigésimo sexta fecha del Torneo Argentino “B”. No era un partido más para ninguno de los dos, ya que el Xeneize desde hacía siete fechas que no podía lograr ganar, y el Verde venía a Río Gallegos con la única misión de ganar para mantener las esperanzas de salvarse de la Promoción. El partido lo ganaba Boca 2 a 1 sobre el Verde, pero tuvo un final lamentable y vergonzoso.  

En el plano estrictamente futbolístico, en el primer tiempo Boca Río Gallegos apostaba a sus tres cartas ofensivas: Etchemaite, Ávila y Chiocarello. Mientras que en la visita Iberlucea por izquierda era el más peligroso por ese sector. 
La mala noticia para Boca y para Busciglio llegó a los 20´ del primer tiempo, cuando Paolo Ferreira pidió el cambio obligado ingresando De Tomasi en su lugar.  

La primera del dueño de casa llegó con Federico Chiocarello, que lo tuvo con un disparo en el que respondió atento el arquero López. 
A los 35´ del primer tiempo fue Iberlucea quien tuvo en su zurda la apertura del marcador, respondiendo Moyano y mandando la pelota al córner ante una defensa que se durmió. Y aprovechando los descuidos del Xeneize en el fondo, a los 37´ Nelson Iberlucea apareció sólo mano a mano con Moyano y puso la ventaja transitoria para el Verde. Pero la alegría de la visita duró unos segundos, porque a los 38´ del primer tiempo Wander de Almeida no dio por perdida una pelota, se asoció con De Tomasi, que tiró el centro por lo bajo y apareció Mario Ávila para lograr el empate 1 a 1. Eran sólo reclamos de la visita por una supuesta posición adelantada que nunca existió. 

Un codazo de Rodrigo Béliz al defensor Germán Villarino sin pelota, que el árbitro y sus asistentes no vieron, comenzó a calentar el ambiente del juego tanto adentro como fuera de la cancha.  
Promediando los 43´ minutos del primer tiempo, se sucedieron los primeros incidentes entre jugadores. Empujones, manotazos varios, golpes de puño y Pagani sólo miraba.  Pasaron más de siete minutos y de esa jugada se irían expulsados Acuña Tejera y Béliz, quien se fue increpando verbalmente al asistente. Ambos se quedaban con diez. El primer tiempo continúo hasta los 54 minutos. 

El segundo tiempo Boca Río Gallegos tuvo más la pelota, pero no podía encontrar la llave para abrir la férrea defensa del Verde. 
Había que probar de otras maneras. Y a los 24´ del complemento, De Almeida probó con un tiro de media distancia que rozó el palo derecho de López. Dos minutos después, la única que tuvo Germinal en el segundo tiempo llegó en los pies de Bruno Neculhueque, que con un derechazo rozó el travesaño.

Boca seguía probando y un centro de Olguín se cerró y dio en el travesaño. El local estaba cerca del segundo. Busciglio mandó a la cancha a Cortés en lugar de Etchemaite, y Juan Manuel debía ser el hilo conductor entre la mitad de la cancha y los delanteros. 
Sobre el minuto 34´, centro desde la derecha de De Almeida a la cabeza de Mario Ávila, que saltó junto a Chiocarell, y el cordobés no falla y pone el partido 2 a 1. Dos minutos después llegó el final bochornoso.



Lamentables Incidentes

Los incidentes se iniciaron cuando Raúl Pagani expulsó por doble amarilla a Diego Flamenco. En ese momento, la parcialidad visitante arrojó piedras y botellas al campo de juego. El ambiente estaba caldeado desde el primer tiempo, y sumado a que Matías López fue “a buscar” a Bastianini, Walter de Lemos (entrenador de arqueros de Boca) intentó separar, y la reacción de los jugadores e integrantes del cuerpo técnico de la visita fue agredir al integrante del cuerpo técnico xeneize, que en un momento fue “arrinconado” sobre el alambrado que daba en la hinchada visitante. Golpes, furia, y un campo de juego de fútbol que se transformaba en un ring y que empañaba una tarde de fútbol. 

Blas Sosa, juvenil de Germinal, con lágrimas en los ojos, fue a buscar a De Lemos, a quien intentó agredir con una patada en donde el entrenador de Boca Sergio Busciglio separó y tranquilizaba al jugador visitante, que era consolado por dos suplentes del equipo verde. Con una imagen lamentable, se fue el público y el triunfo de Boca pasaba a un segundo plano ante los serios incidentes. 

Desde la dirigencia de Boca Río Gallegos se realizó una denuncia en la Comisaría Sexta, jurisdicción de la cancha de Defensores del Carmen en donde se denunció los destrozos ocasionados en los vestuarios visitantes por la gente de Germinal. Asimismo, en las próximas horas los directivos riogalleguenses se comunicarán telefónicamente con el presidente de Germinal. 

Raúl Pagani, de mal arbitraje, suspendió por incidentes el partido cuando lo ganaba Boca 2 a 1 y, según consta en el informe arbitral, fue postergado a los 36´ del complemento. Habrá que ver qué resuelve el Consejo Federal ante el informe del árbitro comodorense. 
Germinal está condenado a jugar la Promoción y seguramente tendrá muchas bajas para lo que se viene ante el informe que elevara Pagani al Consejo Federal.
PRENSA LIBRE


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