TORNEO DEL INTERIOR - Vendieron rifas y empanadas para jugar - Por una sanción, el club no tuvo ingresos y necesitaba dinero para trasladarse a Trelew.
Tres partidos de local sin recaudación. Un viaje interminable a Trelew para definir el ascenso al Argentino B. El final de la temporada mostró las dos caras de la moneda para Deportivo Aguilares. Por un lado, la ilusión de coronar una campaña excepcional con el éxito deportivo. Por el otro, la dura realidad de afrontar una competencia deficitaria con recursos mínimos. A pesar de eso, el "celeste" logró salir a flote y se prepara para encarar el último esfuerzo, el que puede marcar un momento histórico para el club. El plantel viajará mañana hacia el sur del país, donde el domingo, a las 15, jugará la revancha contra Racing, obligado a remontar un 3-2 en contra en la ida y la ventaja deportiva que tiene su rival. Serán 36 horas de viaje, aproximadamente, y un esfuerzo económico que sin ayuda hubiese sido imposible llevar adelante.
Toda una ciudad se movilizó por el equipo. Los dirigentes hicieron un esfuerzo muy grande para paliar las consecuencias de aquella sanción que los obligó a jugar los últimos tres partidos de la fase final sin público, debido a los hechos de violencia del duelo frente a Sportivo Fernández de Santiago del Estero. Y los jugadores también se sumaron a la movilización.
"Todos ayudaron de distintas maneras. De lo contrario no hubiésemos podido seguir compitiendo. El intendente Agustín Fernández y el senador Sergio Mansilla pagaron las multas. Los hinchas fueron casa por casa, comercio por comercio recolectando todo lo que la gente aportaba", explicó el presidente Carlos González, pintando de cuerpo entero a esos hinchas que movilizaron la ciudad del "celeste". El mandatario destacó que se vendieron rifas (sortearon una moto y premios en efectivo) para contribuir con el equipo. "Un grupo de jóvenes hizo 2.000 empanadas para vender. Eso le dejó al club unos $3.000 sin haber tenido que gastar un peso", relató el dirigente, destacando el esfuerzo de aquellos que cooperaron con la causa aportando los ingredientes necesarios.
Emocionado y enorgullecido por tremenda respuesta hacia su club, González aclaró que todo lo recaudado servirá para reabrir el estadio (costará al rededor de $10.000), abonar el sueldo al plantel (se pagó el 50% de la deuda y antes de partir se le completará el resto), cubrir el viaje a Trelew y el hospedaje de los jugadores.
El presidente también sueña con ascender. "Estos jugadores se merecen todo porque sufrieron mucho. Esperemos dar el batacazo. Estamos convencidos que se puede revertir el 2-3. Nada es imposible en el fútbol. Pero si no se logra el ascenso estaremos tranquilos por la gran campaña realizada", anticipa, agradeciendo de antemano el esfuerzo de los suyos.
Tremenda movilización en la ciudad también reavivó las esperanzas de Deportivo Aguilares. Todos sueñan con dar vuelta la historia en Trelew y escalar derechito al Argentino B.
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