LA HERMANA DE MOROSINI

ANTONIO DI NATALE - El fútbol italiano cuidará para siempre de la hermana de Piermario Morosini.

Di Natale realiza un llamamiento a los capitanes de todos los equipos del calcio para ayudar a Carla María. Udinese y Atalanta anuncian que pagarán su tratamiento

La muerte de Piermario Morosini golpeó en lo más profundo a Antonio Di Natale, ídolo del Udinese. Él, consciente de la trágica historia de la familia, fue de los primeros en reclamar ayuda para la hermana del jugador que murió por un ataque al corazón en pleno partido de la Serie B. Morosini y Carla María estaban solos tras haber quedado huérfanos en menos de dos años y haber perdido, además, a su otro hermano. Piermario era el que pagaba los costes de la residencia donde permanecía ingresada Carla María, que nació con una discapacidad psíquica.

La preocupación por la situación de Carla María era evidente. Y la reacción no se hizo esperar. «Ella nos necesita no solo por un día, sino para toda la vida. Y queremos ayudarla en memoria de Mario», explicaba Di Natale a la página web del Udinese, club que había cedido esta temporada al Livorno a Morosini. El «Toto» Di Natale, un héroe por sus goles -es el segundo máximo goleador del calcio- realizó un llamamiento a los capitanes de la Serie A y la Serie B para ayudar a Carla María. Mientras, el Udinese ha abierto una cuenta bancaria para recaudar fondos a través de su Fundación para ayudar a Carla María. Casi al mismo tiempo el presidente del Atalanta, club donde se crió Morosini, explicaba a través de un comunicado que se harían cargo de la hermana del futbolista. «Creo que es mi deber personal y el del Atalanta permanecer para siempre al cuidado de Maria Carla Morosini, como hubiese hecho Piermario si su vida no hubiese sido trágicamente truncada», reza el texto firmado por Antonio Percassi, que explica que será siempre «parte de nuestra familia y jamás deberá preocuparse por nada».

Anna, la otra mujer en la vida de Piermario, se derrumbaba al hablar de su novio a la salida del hospital donde permanece su cuerpo a la espera de que este lunes sea sometido a una autopsia. «Parecía que me sonreía, estaban tan guapo», acertó a decir emocionada antes de romper a llorar. Los homenajes continuarán este lunes. Durante toda la mañana los aficionados del Livorno depositarán flores, bufandas, pancartas y banderas en memoria de un jugador que se había ganado rápidamente el cariño de una de las gradas más pasionales del país. Todo apunta a que en las próximas horas y por deseo de su presidente, el club amaranto anunciará la retirada para siempre del dorsal número 25 que lucía Morosini. La medida ya ha sido adoptada por el Vicenza, donde jugó el centrocampista entre 2007 y 2009. «Un gesto de respeto para respetar la memoria del querido y desafortunado atleta», explica en una nota de prensa el club. Italia sigue llorando por la muerte de Piermario.