Superó por KOT a Ávila, en su tercer triunfo en fila desde
que volvió. El excampeón mundial crucero CMB, el porteño Marcelo
Domínguez, venció al bonaerense Héctor Ávila por nocaut técnico en el séptimo
round de una pelea realizada en Villa Devoto. Foto Jose Luis Valera
La pelea de peso completo fue la atracción de la velada que
se desarrolló en el Club Atlético y Social Deportivo Camioneros.
A los 43 años, Domínguez logró su tercer triunfo consecutivo
desde que regresó a la actividad, después de haberse retirado como campeón
argentino y sudamericano de los pesados el 2 de diciembre de 2006, cuando
superó por nocaut técnico en el sexto asalto al cordobés Fabio La Mole Moli en
el gimnasio de Argentinos Juniors.
En Devoto, El Gordo prevaleció con claridad, sin tener
contratiempos ante Ávila y ya en el sexto capítulo le había causado dos cuentas
de protección al intensificar su ataque.
Por lo tanto, cuando en el séptimo volvió a vulnerar con
facilidad la defensa del visitante, el árbitro Gustavo Tomás dio por finalizada
la contienda.
El ex campeón de los cruceros quedó con un récord de 44
victorias, 27 de ellas por KO, siete derrotas y un empate.
Ávila pasó a tener en su palmarés 22 triunfos, 14 por KO, 15
derrotas y una igualdad.
Marcelo Dominguez ganó con facilidad
BUENOS AIRES.- A los 43 años, Marcelo Domínguez necesitaba
volver a sentir adrenalina. Por eso, el ex campeón crucero CMB volvió a
calzarse los guantes tras seis años y medio de inactividad. Ahora en peso
pesado, el Gordo comenzó un plan de peleas y ya lleva tres, todas ganadas y con
muy buen rendimiento.
En la medianoche del sábado, en el club Camioneros de Villa Devoto, el porteño
Domínguez (105,850 kg) mostró que los años no le pesan y pasó por arriba al
bonaerense Héctor Ávila (101,150 kg), ex campeón nacional crucero.
Desde el primer momento fue el Gordo Domínguez el que impuso condiciones ante
un Tiburón Avila, cinco años menor, que tuvo que conformarse a contraatacar
cuando podía. Si bien se resintió de la mano derecha, los mazazos de Domínguez
fueron demoliendo a su rival y provocaron un quiebre en el trámite en el 6º
round, cuando el árbitro Gustavo Tomás le dio dos cuentas de protección parado
al hombre de Polvorines. En el siguiente asalto, otro ataque a fondo de
Domínguez puso a su rival en un rincón lo que obligó a Tomás a detener el
combate. El récord de Avila cayó a 22-15-1 (14 KO-11PKO).
Domínguez, quien llevó sus números a 44-7-1 (24KO-1PKO), esperaba realizar una
cuarta pelea ante Fabio Moli, quien perdió su título nacional pesado por descalificación
el viernes en Remedios de Escalada y generó una batahola, pelea que queda en
veremos.
“Lo que hizo La Mole es para suspenderlo. Puedo entender que se haya bajado del
ring para defender al hijo, porque un padre siempre va a querer proteger a su
pibe. Pero eso de pegarle a un tipo como Matías Vidondo en el suelo es casi
criminal. Yo hice tres peleas y sé que el grandote tiene la mano pesada. Si se
siente cuando estás en guardia, preparado, imaginate lo que debe ser si estás
en el piso, indefenso. Me parece que se equivocó feo”, explicó el Gordo. EL
SIGLOWEB
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