Juan Domingo "Martillo" Roldán- Un ícono del boxeo argentino de los '80. Nació en Freyre, Argentina el 03 de Junio de 1957, se caracterizó por su potencia y su fuerte pegada en la década del 80´, realizando en la categoría mediano 75 peleas profesionales, con 67 victorias (47 por KO), 5 derrotas (4 por KO y 1 por descalificación) y 2 empates. Peleó en las mejores veladas boxísticas de Las Vegas, compartiendo cartel con Mano de Piedra Durán, Marvin Hagler, Thomas Hearns y Sugar Ray Leonard. Y llegando a combatir en tres oportunidades por la faja mundial de la categoría mediano.
Martillo no era uno de los preferidos de Bob Arum, ya que no tenía una aceptación total en el exigente público norteamericano, el estilo de Roldán no era vistoso, ni técnico, más que nada era un tremendo pegador, que si lograba colocar alguna de sus potentes manos, mandaba a la lona por toda la cuenta a cualquiera de los monstruos del momento. Tuvo su primera chance en Las Vegas el 10 de Noviembre de 1984, frente a Frank "The Animal" Fletcher, conocido como el "pegador más terrible de los Estados Unidos", la definición llegó en el sexto raund, Roldán lo cruzó en el medio del ring. Fletcher quedó muy sentido y empezó a buscar las cuerdas, donde Roldán lo terminó de definir con un KO impresionante. El norteamericano cayó dormido y de ahí hubo que trasladarlo al hospital.
Esa definición le abrió definitivamente la puerta para la pelea con Marvin "Maravilla" Hagler, Campeón Mundial Mediano del Consejo, de la Asociación y de la Federación, una mega estrella del boxeo en la década del 80´. La pelea con Hagler fue finalmente el 30 de Marzo de 1984 en Las Vegas. Maravilla fue demasiado para Roldán quien hizo lo que pudo sobre el ring, a Martillo se lo vio muy bien físicamente y si bien la acción fue dudosa, llegó a poner a Hagler en la lona fugazmente. En el tercer round, Hagler le introdujo el dedo en el ojo izquierdo de manera brutal e imperceptible. A partir de ahí Roldán se desmoronó anímicamente y no pudo sobrellevar el combate con comodidad ya que el ojo estaba completamente cerrado. En el décimo se terminó todo.
Martillo iba a tener una nueva chance 3 años más tarde, precisamente el 29 de Octubre de 1987, frente a la Cobra de Detroit, Thomas Hearns, un boxeador excelente, de fuerte pegada, pero ideal para Roldán ya que Hearns tenia un defecto: mandíbula de cristal. Cuando le pegaban se caía, y Roldán era un pegador. Esta fue la pelea donde Martillo estuvo más cerca de alcanzar la gloria, ya que en el tercero conectó a Hearns y le temblaron las piernas, Martillo en la desesperación por definir, se le fue encima y solo no tuvo la puntería necesaria para poder llevarse el título. Hearns (algo mareado) logró hacer lo que Martillo no pudo, tuvo puntería y frialdad para definir la pelea a su favor y en el round siguiente Roldán fue al piso por toda la cuenta.
Increíblemente un año después le llegó una chance por el título reconocido por la FIB, que estaba en manos de Michael Nunn, quien venía invicto en 31 peleas. Pero Roldán fue una sombra, cayó derrotado y las luces del boxeo se apagaron definitivamente para él. Dejó una gran imagen, siempre estuvo bien entrenado y su vida volvió a ser la que tenía antes de boxear, el campo, la familia, los amigos y los buenos asados. Por supuesto en Freyre
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