jueves, 3 de mayo de 2012

PREVENCION DEPORTIVA

El control, exigencia ineludible - Prevención deportiva. Los recientes accidentes en el fútbol y otros deportes alertaron sobre la necesidad de exámenes. Informe especial de Mundo D.
Cuál es la respuesta médica en Córdoba ante un incidente como el que le costó la vida al futbolista de Livorno Piermario Morosini, en Italia, o al que afectó al congoleño Fabrice Muamba, quien jugando para el Bolton de Inglaterra sufrió un paro cardíaco del que se salvó por lo que se considera un milagro?

¿Cuál fue la respuesta médica ante la situación vivida por Lucas Orban, defensor de Tigre, quien el lunes salió del estadio de Alberdi en ambulancia tras el choque de cabezas con Ribair Rodríguez Pérez?

Tanto Muamba como Morosini recibieron atención médica de inmediato, según lo documentan las imágenes que reflejaron esos dramáticos incidentes, aunque en el caso del italiano la salida de la ambulancia se demoró más de lo prudente. De todas maneras, la respuesta de Morosini no dio margen para una mínima esperanza.

Estos casos sucedieron en Europa, desde donde la información llega dando cuenta de los cada vez más exigentes controles médicos para afrontar la alta competencia. Muamba, con el Bolton, participa de la prestigiosa Premier League; Morosini, en tanto, jugaba en la Serie B italiana.

El de Orban se produjo el lunes pasado, cuando Belgrano y Tigre jugaron en el Gigante. Tuvo otras características a las de sus colegas en Italia y Gran Bretaña. Tras quedar tendido luego de la colisión con el uruguayo, el defensor fue derivado de manera inmediata al hospital de Urgencias, en donde pasó la noche, tras comprobarse que no había sufrido lesión cerebral alguna. Fue una manera de observar cómo es la respuesta médica ante emergencias en espectáculos deportivos.

A propósito, distintos médicos y dirigentes cordobeses consultados sobre el tema acuerdan en que la concientización sobre los cuidados y prevenciones médicas de los deportistas fue aumentado en las últimas décadas.

En Córdoba, una normativa surgida del ministerio de Salud de la provincia exige a cada deportista federado, sea cual fuere la disciplina que practique, la realización de un control médico obligatorio del que no puede evadirse si quiere competir en representación de su club. Su sigla es EMMAC, que significa Examen Médico para la Mediana y Alta Competencia.

Este control consiste en la realización de un análisis de laboratorio, una ergometría y un electrocardiograma. Su concreción habilita al deportista a un carné que debe presentar antes de participar de la competencia.

A propósito, Ricardo Baffaro, tesorero de la Liga Cordobesa de Fútbol y funcionario de la Agencia Córdoba Deportes, aseguró que la Liga “ha sido pionera” en la implementación de este tipo de exámenes.

“Los iniciamos en 1975. Hoy no hay ningún jugador que entre a la cancha sin la correspondiente autorización médica”. De todas maneras, reconoció que es muy difícil para un club de la Liga afrontar el gasto de una ambulancia en el predio en el que se dispute el encuentro.

“Antes, por cuatro horas, el costo era de entre 400 y 500 pesos. Ahora el gasto debe ser mayor porque se han agregado los partidos de inferiores y de fútbol femenino”, advierte el directivo.

En relación a esto, el médico de Atenas, Roberto Giacossa, sostiene que la cobertura médica a los basquetbolistas es buena, común a la de todos los participantes en la Liga Nacional, aunque en particular sostiene que deberían agregarse otros controles.

“Son aquellos análisis que servirían para detectar la ingesta de cocaína, anfetaminas o anabólicos, cuyo consumo perjudica la salud de los deportistas”, revela.

Otra dirigente vinculado al básquetbol, Jorge Cattáneo, actual presidente de la Confederación de Deportes de la Provincia de Córdoba, organismo que contiene a 39 disciplinas deportivas, destaca que el carné habilitante por la realización del Estudio Médico para la Media y Alta Competencia pone en un plano de igualdad a todos los participantes del espectáculo deportivo y previene a aquellos que, sin saberlo, padecen alguna enfermedad o afección que puede comprometerles la vida.

“Diría que las exigencias de la Federación Cordobesa de Básquetbol son mayores que las de la Liga Nacional. En Córdoba un árbitro no puede empezar un partido si algún jugador no ha presentado el carné habilitante”. Y con respecto al resto de las disciplinas deportivas, las precauciones en ese sentido varían según la complejidad y la peligrosidad de cada competencia deportiva. “No es lo mismo afrontar un combate de boxeo que disputar un partido de ajedrez”, aclara.

Precisamente uno de los deportes que representa mayor riesgo, tal su nivel de contacto y la envergadura de sus participantes, es el rugby. Integrante de Los Pumas en los ‘90 y actual médico de Belgrano, el doctor José Luna apunta que una competencia rugbística no puede empezar si no hay una ambulancia en el predio de juego. “Es una erogación necesaria y cara, al tratarse de una disciplina totalmente amateur. Obviamente que los jugadores pueden jugar si acreditan los controles correspondientes”. El que no lo hace, no juega. Así de simple.

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