“Para andar por la vida no hace falta rehabilitación, sino
ganas” - Dijo esta mañana en la radio Juan María Nimo, un joven con
diferentes capacidades motoras, deportista de alta competencia y con un gran
desafío por delante, y sencillamente, desde su silla de ruedas, agregó que
basándose en su historia, “mirando para atrás, estoy en condiciones de asegurar
que desde mi punto de vista, sentado veo más alto que parado”.
Juan María Nimo (Audio: Por Convicción – 97.9 del Colorado)
Con 25 años, ‘gato’ Nimo, como lo apodan en su familia desde pequeño, se
moviliza en silla de ruedas desde hace siete años cuando en una competencia de
motos, corriendo para Honda, tuvo un accidente que lo dejó sin movilidad en sus
piernas, pero que le reimpulsó el espíritu aventurero y el compromiso con la
vida.
Así es que en pocos días está iniciando un tremendo desafío al que llama
‘Pasamanos solidario’: unir su lugar de residencia, Neuquén, con la Capital
Federal, es decir, 1201 kilómetros, en 18 etapas de entre 50 y 100 kilómetros,
durante veinte días de 6 á 13 horas diarias de marcha sobre una silla impulsada
por el mismo con tracción manual a la rueda.
Pero, para que el desafío no sea solamente una cuestión individual, Juan
propone una instancia solidaria maravillosa: está previsto que el fin de cada
etapa coincida con el arribo a alguna ciudad, localidad, pueblo o paraje,
entonces la consigna es que con el trabajo de prensa previo, los pobladores de
cada zona urbanizada esperen su llegada para acercarse, establecer el contacto
y efectuar en ese mismo lugar las donaciones de artículos ortopédicos como
sillas de ruedas, prótesis, órtesis, etcétera.
“Si bien la idea es lograr que la gente se acerque a donar, también pretendemos
que aquel que necesite se acerque a retirar lo que le haga falta generando una
especie de “pasamanos solidario’”, propone el joven deportista dispuesto a
cruzar cuatro provincias: Neuquén, Río Negro, La Pampa y Buenos Aires.
“Como el desafío no tomó estado público aun, todavía no sé a qué entidades
representaré, ni que empresas colaborarán con la misión, como así tampoco la
suma de dinero con la que contará el equipo de logística, pero existen estas
dos posibles ideas para llevar adelante”, agregó, y confirmó que entre el 5 y
seis de septiembre estará pasando por la comarca del Colorado.
“Más allá del acontecimiento temporal o permanente, existe una continuidad de
la vida, más allá de la posibilidad de una recuperación, la vida continua para
seguir sanando, para seguir haciendo, para seguir soñando y para seguir
logrando lo que uno se propone”, escribió Juan.
Hace falta agregar al más?
Desafío 2013
Hola, mi nombre es Juan Maria Nimo, nací en la ciudad de Neuquén, en la
provincia homónima en el año 1988. Mi ciudad se ubica a unos 1200 kilómetros de
Buenos Airesla capital de mi país.
Desde temprana edad comencé a competir en la disciplina denominada Motociclismo
en la especialidad Motocross. Con el correr de los años fui completando cada
una de las etapas y categorías hasta llegar a convertirme en un piloto
profesional a los 16 años.
En el año 2006, ya con varios títulos nacionales e internacionales en mi haber,
corriendo en Chile como piloto oficial de una reconocida marca a nivel mundial
sufrí una caída que me produjo una lesión medular cuya consecuencia fue dejarme
en silla de ruedas.
Hasta ese momento -yo tenía 18 años- había forjado una carrera caracterizada
por un alto de grado de compromiso tanto para competir como a la hora de
entrenar, procurando en todo momento cumplir al 100 % con el comportamiento, la
conducta y las exigencias de un deportista profesional.
Fueron dichas cualidades adquiridas a través de los años de entrenamiento
físico y mental las que permitieron que durante de mi recuperación, y sobre
todo en la parte más crítica, estuviera capacitado emocionalmente para superar
los obstáculos y dar continuidad a mi vida permitiendo una rápida adaptación a
mi nueva realidad.
“El mundo de la silla de ruedas” en países como el mío y tantos otros permanece
oculto tomando el tinte de “tema tabú” en algunas ocasiones, y justamente fue
dicha invisibilidad lo que me motivó a comenzar tratar de instaurar otra visión
de las denominadas capacidades diferentes.
Hoy con 25 años cumplidos puedo decir que adapté cada deporte de mi interés a
mi condición. Debo confesar que no resultó fácil convencer a autoridades
deportivas para ir alcanzando objetivos. En la práctica no resulta sencillo que
estos acepten, integren y permitan a uno ser un profesional, aun así continuo
intentándolo día a día…
Por este motivo y luego de varios meses de experiencias y reflexiones me
encuentro en estos momentos llevando adelante junto a un grupo de amigos una
nueva lucha cuya finalidad es desarrollar otra perspectiva de las capacidades
diferentes, alejada de sensaciones de la lastima, el morbo y la visión
hospitalaria y ejemplificadora con las que se las vincula.
Comprometido con este enfoque es que entreno para sumar actividades; he sido el
primer piloto de autos de pista con mandos al volante mecánicos-NO electrónicos
ya que las autoridades entendían que podía obtener ventaja deportiva-,
posteriormente incursioné en el Rally peleando campeonatos y carreras.
Estuve compitiendo nuevamente por los primeros puestos en carreras de
Motocross, y participé de la última edición del “Enduro del Verano”,
considerada la carrera más importante de Latinoamérica-el equivalente al Le
Touquet de Francia-.
Además de incursionar en las acrobacias aéreas y la danza, continué practicando
otras disciplinas del deporte motor como Kart, Supermoto, ATV, Rally Cross, Jet
Ski, moto de agua, Wakeboard, Ski de nieve y hasta me atreví a pilotear
aviones.
La variedad de actividades que he realizado las he afrontado económicamente con
muy bajo presupuesto. No resulta fácil en este país hallar empresas y sponsors
comprometidos en ayudar a demostrar que una persona con capacidades diferentes
puede dedicarse a lo que le apasiona, o en mi caso, continuar siendo un
profesional del deporte.
Desde el comienzo mi lucha personal tiene un solo objetivo: mostrar mi alto
nivel de profesionalismo como deportista con capacidades diferentes; demostrar
que estoy apto y que aun en mi condición soy capaz de enfrentar nuevos y
ambiciosos desafíos.
Para ello, esta vez me he propuesto unir mi ciudad, Neuquén con la capital de
mi país, Buenos Aires durante el mes de Septiembre a bordo de una silla de
ruedas maratón de tracción manual a la rueda con un fin solidario.
1) El desafío
El recorrido, que comenzará en el puente carretero de la ciudad y finalizará 20
días más tarde en el Obelisco en Buenos Aires, será enfrentado con una silla de
ruedas maratón de tracción manual a la rueda -silla de tracción manual a
anillos en las ruedas, NO pedales de tipo bicicleta-.
La hoja de ruta incluye 1201 kilómetros pautados en 18 etapas de entre 100 y 50
kilómetros. Las mismas fueron definidas en función al terreno, teniendo en
cuenta las características de los tramos y las variaciones empinadas que
demandarán mayor esfuerzo y desgaste lo que podrá afectar directamente la
velocidad promedio.
La idea es remar en mi silla entre 6 y 13 horas diarias y parar a hacer noche
en diferentes ciudades. El horario aproximado de llegada o paso por las mismas
se difundirá con antelación con el objetivo de que los interesados acerquen
donaciones que serán entregadas a diferentes entidades.
2) El equipo
Durante el desafío contaré con el acompañamiento de un grupo de asistencia que
estará avacado a las tareas de logística y de seguridad en la carretera para
afectarlo menos posible el normal flojo vehicular.
También contaré con el asesoramiento de un equipo de médicos, kinesiólogos y
psicólogos que actualmente están definiendo el adecuado plan psicofísico a
implantar durante el reto; como así también las tareas optimas de regeneración
durante los 2 días de descanso que tendré.
3) Recorrido:
Si bien el cronograma exacto está por definirse, durante el reto mi equipo y yo
vamos a transitar por cuatro provincias: Neuquén, Rio Negro, La Pampa y Buenos
Aires y por cerca de 40 localidades.
En aquellas zonas que no cuenten concentro urbano con alojamiento tradicional
pernoctaremos en carpa y/o casilla del grupo operativo que acompañe.
Estimamos que la aventura significará un gran desafió para todos, seguramente
se trasformará en una experiencia enriquecedora a nivel humano y profesional y
es por ello que una vez alcanzado prendemos asentarlo como un gran record.
Yo pondré todo mi entusiasmo, mi esfuerzo físico y mental y todos ustedes el
aliento, el acompañamiento y la colaboración que puedan ofrecernos.
Donaciones
Fines solidarios
Está previsto que el fin de cada etapa coincida con el arribo a alguna ciudad,
localidad, pueblo o paraje. La consigna es que con el trabajo de prensa previo,
los pobladores de cada zona urbanizada esperen mi paso y/o llegada para
acercarse, establecer el contacto y efectuar las donaciones en ese mismo lugar.
Como el desafío no tomó estado público aun, todavía no sé a qué entidades
representaré, ni que empresas colaborarán con la misión, como así tampoco la
suma de dinero con la que contará el equipo de logística. Pero existen dos
posibles ideas para llevar adelante.
Por un lado, pretendemos reunir, a modo de donación, artículos ortopédicos como
sillas de ruedas, prótesis, ortesis, etc. Si bien la idea es lograr que la
gente se acerque a donar, también pretendemos que aquel que necesite se acerque
a retirar lo que le haga falta generando una especie de “pasamanos solidario”.
Por otro lado, nos gustaría representar a alguna entidad ligada a la causa para
hacerle llegar al finalizar el desafío parte de lo recaudado en donaciones
materiales, como así también entregar en pesos argentinos una suma de dinero
destinado a resolver cuestiones edilicias. La suma se deduciría del sobrante de
gastos recaudados por sponsor para costear la logística del desafío.
Algunas consideraciones sobre las donaciones
Se está analizando la posibilidad de que la colecta no solo esté enfocada
recolectar artículos ortopédicos, sino que también se incluyan juguetes, ropa,
alimentos, pañales, frazadas, abrigos, elementos deportivos, etc.
No tiene por qué ser una donación material
En esta experiencia en la que nos hemos embarcado también hay espacio para
donar ideas, sonrisas, palabras, gestos y para compartir lo que uno crea
necesario con la finalidad de establecer un vínculo de unión para que este gran
desafío sea llevado adelante colectivamente.
Mi motivo
Nadie tiene nada comprado ni asegurado en la vida, a cualquiera puede sucederle
que un día su vida cambie de un segundo al otro. Hay cuestiones que no
diferencian clase social, raza, sexo, ni edad, no existe nada que nos asegure
mantenernos exentos o inmunes. Ahí radica la importancia, según mi parecer, de
mostrar que más allá del acontecimiento temporal o permanente, existe una
continuidad de la vida, más allá de la posibilidad de una recuperación, la vida
continua para seguir sanando, para seguir haciendo, para seguir soñando y para
seguir logrando lo que uno se propone.
Basándome en mi historia, mirando para atrás, estoy en condiciones de asegurar
que desde mi punto de vista, sentado veo más alto que parado.
Gracias
Juan Nimo (- #eldesafiodelaño/juannimo)
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