MURIO PEDRO ORTEGA EX PRESIDENTE - El presidente honorario de la Liga de Fútbol Valle del Chubut falleció en la madrugada de hoy aquejado de una penosa enfermedad a los 90 años. El hombre nacido en Francia y criado en Dolavon fue jugador, árbitro, delegado y por 17 años titular del ente liguista.
Don Pedro Ortega fue toda una institución para el fútbol de esta parte de la provincia, el hombre que prestigió a la Liga valletana. Recorrió todos los estamentos del deporte: fue jugador, árbitro y dirigente. Nació un 28 de abril de 1.921 en un pueblo de Francia llamado Chalon Sur Seoane y luego su familia se trasladó a la Argentina para radicarse en Dolavon, la localidad de las norias como la llamó el profesor Alberto Astutti, años más tarde se nacionalizó argentino.
En los albores del siglo, Don Pedro comenzó a jugar al fútbol en el club del pueblo donde se crió, luego fue árbitros en aquellas canchas donde había que ser muy guapo para poder llevar adelante un partido. Hombre de carácter si los había. Luego defendió con uñas y dientes los colores de su club como delegado en la Liga (12 años). Tanto temperamento y empeño en conseguir sus objetivos lo llevaron a que el resto de sus pares lo eligieran como presidente en 1.988, en ese cargo permaneció hasta 2.005 cuando decidió dar un paso al costado cumplido el sueño que la entidad tenga su sede propia en Belgrano 33 de Trelew, con todas las comodidades, incluyendo un albergue de lujo. Esto le llevó mucho sacrificio, rabietas y discusiones con los representantes de los clubes pero como era un viejo testarudo se salió con la suya, perseverante por sobre todas las cosas. Esta obra, sobretodo, hará perdurar su nombre en la memoria de todas las personas relaciones con este deporte.
Su sucesor, Javier Treuque, quién creció y aprendió todos los secretos del manejo de la institución de Pedro Ortega, impulsó la idea de hacerlo presidente honorario. En el 2005 fue reconocido como ciudadano ilustre de Trelew por su gran labor como dirigente deportivo, y un año después, la propia AFA lo premió como a un dirigente destacado del fútbol del interior.
Los restos del histórico dirigente chubutense son velados en la sala velatoria de Puerto Madryn y serán inhumados mañana a las 11 en el cementerio municipal portuario.
Javier Treuque
Presidente de la Liga del Valle
“Fue el hombre que nos marcó, enseñó, que nos propuso colaborar con él. Una persona con ideales convincentes, cada cosa que se proponía había que seguirlo, eso lo llevó a tener enfrentamientos con dirigentes, técnicos, jugadores pero casi siempre se lograban concretar”.
“Fue un referente como dirigente en la Patagonia y a nivel nacional. No hay mucho para decir, sólo que descanse en paz”.
“Antes de entrar a la liga ya lo conocía, pero lo conocí bien en 1989 cuando empecé como delegado de Germinal, en 1993 me incorpora en su comisión directiva y empecé a trabajar con él, en el 2005 me dijo que no iba a seguir más como presidente y que me tenía que hacer cargo de la Liga”.
“Cuando íbamos a la AFA y decíamos que veníamos de la Liga del Valle y de parte de él y entrábamos por cualquier lado, Grondona lo tenía muy en cuenta”.
Jorge Iriarte
Presidente de Racing
“Para mí fue una persona muy especial, me ayudo mucho a cómo manejarme dentro de un club, siempre teníamos algunas discusiones pero siempre para mejorar. El “viejo” se agarraba algunos berrinches pero después se le pasaba, al día siguiente estaba todo bien. Era imposible pelearse con él.”
“Fue un ejemplo de dirigente, lo quería mucho, una persona para escuchar, una pérdida muy importante para lo que es el fútbol del valle”.
Héctor Febrero
Ex presidente de Germinal.
“Como lo que le ha pesado a mucha gente que está en el fútbol, es una perdida de un amigo, sin dobleces, de fuertes convicciones. He tenido el honor de representarlo en el Consejo Federal por decisión de él. Era una buena persona, con su carácter, más allá que en la vida todos tenemos nuestro tiempo, lo vamos a extrañar”.
“Lo conocía de hace mas de 30 años pero hemos tenido contacto fluido desde la década del ochenta. Además de afinidad y un respeto importante por su personalidad arrolladora, con la cual enfrentó todas las situaciones con hidalguía”.
“Hace muchos años que lo conocía, desde 1988, muchas veces, cuando ya no estaba en la Liga, pasaba a tomar un café por el negocio y a charlar de fútbol. Marcó una forma de conducirnos, de guiarnos y lo vamos a sentir mucho ahora que no está”.
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