Coronado de gloria - El Chino Maidana es campeón welter de la AMB: le dio tal
paliza al invicto Broner que se ganó las luces del estrellato. Estados Unidos . Para cerrarle la enorme bocaza a
Adrien Broner, había que pegarle mucho y duro. No lo habían podido hacer
ninguno de sus 27 rivales en el campo rentado, 22 de los cuales terminaron en
la lona.
Pero el campeón invicto, el amigo de Floyd Mayweather, rey del mundo
en tres categorías diferentes pese a sus 24 años, se encontró con la mejor
noche de Marcos Maidana, un enorme pegador que se recibió de boxeador con una
demostración suficiente para que, aún en las tarjetas, no hubiese chance de que
el título welter de la AMB no cambie de dueño.
Ahora lo ostenta el Chino, que fue dos veces campeón superligero pero el
domingo a la madrugada ganó la pelea más importante de su vida, la que lo pone
en el centro de la escena, como protagonista principal y ya no como partenaire
o promesa de espectáculo, la que hizo trasnochar a más de uno para disfrutar un
combate que tuvo de todo.
Como hace poco más de un año Maravilla Martínez prometió y cumplió ante Julio
César Chávez junior, Maidana dio una lección a un campeón que nunca había
caído, y que besó la lona dos veces y se fue directo al hospital. Sin haber
podido detener el vendaval de golpes que le llegaban con la derecha y la
izquierda de un gran pegador que ha aprendido mucho en los últimos meses y que
no dejó dudas pese a no poder derribar para toda la cuenta a Broner.
En el estadio cerrado del AlamoDome, en la ciudad de San Antonio en la que se
venera a Emanuel Ginóbili, Maidana se hizo ídolo al ganarle por puntos en fallo
unánime (115-110 dio Stanley Christodoulou, el sudafricano que arbitró la
mítica pelea entre Víctor Galíndez y Richie Kates, 116-109 Nelson Vázquez y
117-109 Levi Martínez).
Aunque la diferencia y lo mal que la pasó Broner hubiesen merecido un KO. Algo
que acarició el Chino cuando lo envió a la lona en el segundo y en el octavo
rounds, además de tenerlo al borde en el primero y en el noveno, después de que
el local, que en varios pasajes tuvo posturas antirreglamentarias no castigadas
por un árbitro impresentable, aprovechó un leve cabezazo de Maidana (lo penaron
correctamente con un punto de descuento) y tuvo un largo rato para tratar de
recomponerse.
Algo que debió hacer desde el primer campanazo. Porque el argentino, un
guerrero del ring, salió con todo y a poco estuvo de noquear a Broner en el
minuto inicial. Lo que no pudo en el primero, Maidana lo logró apenas comenzado
el segundo cuando derribó al campeón con un gancho de izquierda que pareció
ponerle punto final a la pelea. Broner, trabando desesperadamente, sobrevivió
la vuelta pero de su rostro se borró la sonrisa sobradora de los días previos,
tanto como creció la confianza del pugilista de Margarita. Que siguió
lastimando con voleos de ambas manos, dosificando fuerzas por el tremendo
desgaste, pasando por momentos de paridad que rompió enseguida desbordando con
la izquierda a la cabeza de un Broner que no pudo hacer nada ante un rival
enorme.
No hay comentarios:
Publicar un comentario