JORGE VIEJO – PROYECTO DE FUTBOL MENOR - Experiencia y calidad para asesorar el fútbol menor de la CAI. Un nuevo desafío para un Viejo entrenador de inferiores. Jorge Viejo encabeza desde hace algunos días el proyecto del fútbol menor en la Comisión de Actividades Infantiles. Lo suyo se remite estrictamente a todo lo que significa fútbol.
Vino acompañando y es parte del cuerpo técnico de la primera del Torneo Argentino ‘A’ que encabeza el ‘Pipa’ Gancedo y se encarga en la parte futbolística de todo lo que es la formación en el ‘Azzurro’.
“Esto me aporta conocimiento. Siempre uno tiene deseos de mejorar y aprender, y de aplicar las cosas que ha conseguido hasta el momento. Se ha dado la oportunidad aquí, en este momento y veremos cómo podemos desarrollar la idea que tenemos”, comenzó diciendo en su diálogo con nuestro cronista sobre su llegada a estas latitudes. Él, firmemente, cree que todo desde el punto futbolístico, es válido. Y mientras se pueda ver alguna posibilidad de aplicar las ideas que tiene, bienvenido sea. No importa el lugar.
De la dirigencia de la Comisión de Actividades Infantiles y el plantel de trabajo con el que cuenta, remarcó que por el momento se está atravesando una etapa de supervisión y diagnóstico para poder después ya formalizar este último y, a partir de ahí, ver de aplicar las ideas que trae para poder iniciar una especie de academia del fútbol.
“De la CAI conocía bastante, porque yo en mi paso por River los recibí a menudo por allá y nos visitaban seguido, jugábamos partidos siempre y teníamos relación con el señor Peralta (Carlos, presidente del club) y sabía de las funciones, expectativas y la creatividad que tienen.
La formación de jugadores es más o menos la idea madre de su presencia en Comodoro, y tal vez factor determinante en la contratación del cuerpo técnico del equipo de Torneo Argentino ‘A’ que encabeza Leonel Gancedo, secundado por Cristian Dollberg. “Todo lo que sea captación, formación y desarrollo, todo lo que implique la educación del futbolista”, refirió el entrenador.
En cuanto a lo observado en la ciudad de Comodoro Rivadavia acerca de infraestructura y condiciones de trabajo, qué hay y qué falta, Viejo consideró que hay mucho pero falta bastante también. “La materia prima está, que es lo más importante, después hay que rodearlos de la infraestructura que uno necesita para hacerle cómodo el paso de la academia al futbolista”, expresó.
Por ello, remarcó que ese paso implica parte de la formación en lo que es lo específico del fútbol, la cultura y los valores, que cree que hoy ha sido algo que se ha perdido en este deporte, por lo cual pondrá el acento en ese ámbito, y en no perder el sabor del juego por el juego mismo.
“Ahora se juegan muchas cuestiones tácticas que han hecho que se dejara la técnica un tanto de lado, y sin la técnica la táctica no existe. Porque el fútbol es un juego físico, técnico-táctico y psicológico”, explicó el experimentado formador de divisiones inferiores.
Etapa de diagnóstico
Pasando al análisis del material humano con el que cuenta, Viejo sostuvo que por el momento es un tanto prematuro abrir un juicio y dar un diagnóstico concluyente del tema, pero admitió que lo visto hasta el momento le agradó y cree que hay en la institución un potencial más que importante como para trabajar.
En tal sentido, manifestó que tratará de imponer su propia impronta de trabajo sobre lo que ya está hecho y, sobre lo que está, aplicar sus conocimientos y seguir construyendo. “Sino, mi paso por aquí sería algo inútil. Siempre uno pretende generar cosas nuevas sobre lo hecho. No es que uno vaya a desechar lo que ya había, sino que va a aprovechar eso y sobre tal, seguir construyendo.
Jorge Viejo conversó con la dirigencia antes de comenzar con sus labores y esta le ha expresado su confianza plena, algo que le llena de responsabilidad, por lo cual tratará de colmar las expectativas que eso le genera. Pero los objetivos son propios, de sí mismo. “Uno es competitivo, cree que tiene que tener obligaciones a corto, mediano y largo plazo”, le describió a Crónica.
Ayer pasado el mediodía en el césped sintético de Huracán, donde el plantel de primera y reserva jugó amistosamente en tiempos de 30 minutos amistosos informales con el local, Nueva Generación y Florentino Ameghino, el avezado entrenador dijo haber observado una buena voluntad por jugar, tratar bien la pelota por parte de todos, algo que ve como muy aliciente, y ve que “pese al viento -lo consideró como un problema bastante especial pero que forma parte de un todo- se trata de jugar por abajo, no levantar la pelota para que no se vuele, y eso obliga a ver un juego comprometido”.
La relación con Gancedo y Dollberg
Su incorporación al cuerpo técnico surgió del tiempo en que fuera entrenador de divisiones inferiores de Argentinos Juniors durante once años, y los tuvo a ambos (Gancedo y Dollberg) como jugadores. El contacto para terminar trabajando juntos se manifestó en una amistad prolongada entre los tres, hasta que en un momento dado ellos enfatizaron su voluntad de ser entrenadores, formarse y seguir investigando, indagando sobre el fútbol, materia en la cual lo contaron como referente principal.
Y lo convencieron de que sería bueno un desafío de tomar un fútbol desde arriba hacia abajo, cosa que cree oportuna, porque a la inversa no funciona ya que los entrenadores de primera división, con sus urgencias y emergencias empiezan muchas veces a “arrancar jugadores verdes”, y muchas veces terminan abortando proyectos interesantes.
Hereditariamente en lo futbolístico, Viejo cree que adoptaron muchos de los conceptos y preceptos que él les inculcó hace ya varios años. “Creen en lo que uno cree. Que la ideología que uno tiene es la que ellos sienten. Esto es un juego responsable. Estratégico, pero un juego en fin. Adhiero al juego y las libertades. Creo en la libertad de vivir y de jugar”, concluyó.
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