El análisis de la fecha de los árbitros, por Angel
Sánchez - Interna. En la semana previa al inicio del torneo Final
se conoció la llegada de Alejandro Toia y Luis Segura al Colegio de Árbitros.
El primero, recordemos, está enfrentado con Francisco Lamolina, el
vicepresidente del citado organismo, por diferencias en cuanto a las
designaciones (además, rechazó la de su último partido, Rafaela-Vélez, por
considerar que no era lo acordado).
Cabe recordar que se trataba del secretario general del
gremio de la Asociación Argentina de Árbitros, y que debió renunciar a esta
posición por su nueva designación. Además, Toia siempre fue crítico de la
gestión de Lamolina, entendiendo que beneficiaba con sus nombramientos y
promociones a los árbitros del otro gremio, el Sadra, que encabeza Guillermo
Marconi.
Luis Segura, por su parte, el presidente de Argentinos
Juniors, es un dirigente leal a Julio Grondona, lo que evidentemente trata de
minimizar el poder de decisión que puede tener Lamolina en la estructura del
Colegio de Árbitros. Sumemos a esto que muchos dirigentes del fútbol habían
visto con agrado la llegada de Héctor Baldassi al organismo, pero debido a las
exigencias de éste, que tenían que ver con la baja de árbitros de primer nivel
y de cambiar viejas estructuras del arbitraje, se prefirió dar continuidad a lo
ya existente.
Evidentemente, Lamolina cada vez cuenta con menor margen de
acción en su cargo. Está rodeado. Desde que llegó a su puesto recibió muchas
objeciones desde dentro del ambiente del referato y vio cómo su poder iba
siendo recortado paulatinamente por Julio Grondona. Con la sombra de Pablo
Lunati sobre su cabeza -se dice que ocupará su cargo a mediados de año, cuando
concluya el torneo Final- y la dirigencia del fútbol con una mayor
participación en el organismo que controla el arbitraje, se genera
evidentemente una clara injerencia y presión que cae sin piedad sobre las
espaldas del referato. De ninguna manera esto resulta positivo para cualquier
ámbito del fútbol argentino.
Gran trabajo de Loustau: le dio gran dinámica al juego y
sancionó correctamente los dos penales. Manejó bien el partido desde lo
disciplinario.
Diego Ceballos tuvo un partido regular. Su actuación no
incidió en el resultado, pero aplicó criterios distintos a la hora de
sancionar.
VACANTE.
Auspicioso comienzo de los árbitros. En general tuvieron
actuaciones correctas en esta primera fecha, más allá de disentir en algunas
sanciones disciplinarias.
LUNATI, A LO LUNATI
Su estilo. Pablo Lunati, a lo Lunati, dirigió Boca-Quilmes y manejó el partido a su antojo. Él
decide cuándo es el momento de amonestar más allá de lo reglamentario, o cuándo
es amarilla por roja. Como la infracción de Férnandez, de Boca, o la doble
amarilla a Caruzzo cuando era roja directa por evitar una oportunidad
manifiesta de gol. Más allá de esto, que es lo habitual en sus actuaciones,
sancionó correctamente el penal y no incidió en el resultado del partido.
GRAN INICIO DE DELFINO
Autoridad. Buen trabajo de Germán Delfino en Belgrano vs. River. Trató de dar continuidad al juego
a pesar de la poca colaboración de los futbolistas, sobre todo en el primer
tiempo (hubo una mano de Vangioni casual). En el segundo, con la correcta
expulsión de Ponzio, el partido se hizo más dinámico y ahí sí logró el
objetivo. Criterioso en las amarillas, no se dejó impresionar con los reclamos,
sobre todo de Díaz. Tuvo gran autoridad para un partido complejo.
28 historial
partidos dirigió Pablo Lunati a Boca, con 19 victorias para el xeneize, cinco
empates y cuatro derrotas.
penales se cobraron hasta ahora: dos convertidos, dos atajados y uno desviado.
En la primera del Inicial, hubo seis.
Alex Ferguson - DT de Manchester, tras un partido de su equipo ante
Tottenham. Tras estas declaraciones, la Asociación Inglesa de Fútbol lo multó
con 18.900 dólares.
5 sin eficacia
DIXIT
"No había manera de que tuviésemos una decisión a
nuestro favor del línea"
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