La Joya Chaves, por demolición - Por Horacio Pagani. El argentino venció al retador panameño José Miranda, de pobre desempeño, por KOT en el segundo round.
Con una gran ventaja de potencia , el invicto bonaerense Diego “La Joya” Chaves venció por nocaut técnico en el segundo round al panameño José Miranda y retuvo el título mundial welter AMB interino, en el Luna Park, ante cinco mil personas.
Era previsible. Ya en el primer round Chaves lo puso en aprietos a su rival, que sumó una más a su lista de 11 derrotas y unas pocas victorias. Y en el segundo, lo derribó con un derecha abierta antes de combinar una serie de golpes que liquidaron la pelea.
Fue su primera defensa del cinturón que el argentino había conquistado en Villa Ballester el 21 de julio, cuando venció al marroquí Ismael El Massoudi por nocaut en el segundo asalto. Ex jugador de Velez, Chaves fue arropado por el calor de “El Fortín”, representado por “Poroto” Cubero quien llevaba el cinturó y otros futbolistas.
Pero hace rato que la seriedad del boxeo internacional está en crisis. De aquellas ocho campeones mundiales únicos, en ocho categorías, del tiempo de oro boxístico -con sospechas de mafias incluidas, en EE. UU.- se cayó, lentamente, a este despropósito de cetros bifurcados en 17 divisiones, y en cuatro grandes organismos rectores (más otros de menor predicamento).
El invento de los títulos “interinos”, originalmente diagramados para reemplazar a un campeón en receso por alguna lesión, terminó enquistándose en la permanencia simultánea con el campeón, ahora llamado “regular”.
Y hay organizaciones, como la Asociación Mundial de Boxeo, que llegó a tener cuatro campeones en una misma categoría con distintas nominaciones.
Todo parece provisorio, circunstancial .
El único objetivo es sumar dinero . Y no importa si la gente reconoce o no a los verdaderos campeones.
Este ejemplo de la categoría welter de la AMB es apenas uno más. Diego La Joya Chaves- ex futbolista velezano, de un clan de boxeadores desde su abuelo Rudecindo, quien también peleó en el Luna Park, sus tíos y sus primos- disputó imprevistamente el título “interino” con 26 años y 20 peleas invicto.
Se suponía que había ganado la chance para enfrentar en breve al campeón regular, el estadounidense Paul Malignaggi. Sin embargo, por otra parte, la misma AMB había aceptado la renuncia de Marcos Maidana al título de los superwelters (le costaba mucho dar el peso) y le brindó la oportunidad de combatir en welter y enfrentar al mexicano Jesús Soto Karass por una corona Interamericana vacante (otro invento), con rasgo de “eliminatoria” para pelear con Malignaggi. Todo por el mismo precio: Maidana o el ganador de Chaves-Miranda para llegar a Malignaggi. La lógica dentro de las desprolijidadades hubiera sido hacer un combate entre Chaves, ganador, y Maidana, por el interino, y encontrar al retador del campeón regular.
Pero no es usual que dos argentinos de enfrenten por un tíitulo mundial (Victor Galíndez le ganó a Jorge Ahumada, en el Madison de Nueva York en 1975) y, además deben negociar sus representantes. Osvaldo Rivero tiene ahora a Chaves, y Sebastián Contursi, es el asesor de Maidana. Los dos boxeadores eran representados antes por Mario Margossian.
Pero nunca se sabrá la decisión final de la AMB, sujeta a intereses y conveniencias.
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