Un hombre que sueña con la pista de atletismo
El referente de la Asociación de Atletas Mayores, se ilusiona con la llegada de una pista de atletismo a la ciudad. Nacido en Chaco un 9 de marzo de 1935, Luís Fernando Palma, se abrió paso en la vida, llegando hasta Río Turbio donde realizó sus primeras armas en el fútbol en el equipo de talleres como centro delantero en la década de los sesenta, llegando a nuestra ciudad en el año 1966 participando de los primeros pasos del club Independiente, (con Gumersindo Pacheco, Hernández y tantos otros), más adelante en su vida aparece como miembro fundador del Club Los Andes, corría para entonces el año 1968, y aún conserva el trofeo de campeón de la Liga del año 1970/1971, como una reliquia muy preciada. Precisamente el desaparecido Club Los Andes lo tuvo como uno de sus referentes en la Liga de fútbol, cuando funcionaba en calle Avellaneda, antes de trasladarse a las actuales instalaciones de la calle Alvear. Recuerdos como jugador de tantos amigos que dejó la vida.
El referente de la Asociación de Atletas Mayores, se ilusiona con la llegada de una pista de atletismo a la ciudad. Nacido en Chaco un 9 de marzo de 1935, Luís Fernando Palma, se abrió paso en la vida, llegando hasta Río Turbio donde realizó sus primeras armas en el fútbol en el equipo de talleres como centro delantero en la década de los sesenta, llegando a nuestra ciudad en el año 1966 participando de los primeros pasos del club Independiente, (con Gumersindo Pacheco, Hernández y tantos otros), más adelante en su vida aparece como miembro fundador del Club Los Andes, corría para entonces el año 1968, y aún conserva el trofeo de campeón de la Liga del año 1970/1971, como una reliquia muy preciada. Precisamente el desaparecido Club Los Andes lo tuvo como uno de sus referentes en la Liga de fútbol, cuando funcionaba en calle Avellaneda, antes de trasladarse a las actuales instalaciones de la calle Alvear. Recuerdos como jugador de tantos amigos que dejó la vida.
Del mismo modo ya en otras tareas este hombre que hoy pinta canas recuerda su paso por los Juegos Evita con el equipo del recordado comercio de nuestra ciudad “Ferretería Surco” que logró conformar con el apoyo de Mario Blaser para ganar las instancias locales y provinciales en fútbol y llegar a Córdoba a las instancias finales. Un recuerdo imborrable, allá por los setenta. También guarda en un pedazo de su corazón su paso por el fútbol barrial, con los amigos que cosecho tras tardes inolvidables en el club Matadero y Arco iris entre otros.Este hombre, incansable trabajador, casado hace 46 años con su esposa Sonia y sus hijos Mirna, Luís y Jorge ya cumplió su primer sueño en la vida, construir su familia y asegurar con el trabajo y esfuerzo diario, el futuro precisamente de su familia. No extraña para nada entonces cuando también decidió emprender una tarea dirigencial paralela a su actividad deportiva, cuando por invitación de un amigo a los 54 años, acepta el desafío de incorporarse al atletismo.Así Luís Fernando Palma, inicia una larga maratón de luchas, sacrificios y responsabilidades, quizás tal cual como lo fue en otros deportes, pero en el atletismo se ha fijado una meta, más allá del esfuerzo en cada competencia, “lograr que cada día se cultive mejor un chico a través del deporte” sentencia, pero su máximo sueño y su mayor aspiración es poder ver con sus propios ojos, en esta ciudad, la tan preciada pista de atletismo, un sueño que lo intranquiliza, porque sospecha que es una tarea para nada sencilla, pero confía en la palabra de quienes se han comprometido.Luís Palma ha participado en innumerables competencias de atletismo, no solo en nuestra ciudad, sino también en Comodoro Rivadavia, en la tradicional maratón del diario Crónica, también en Campeonatos Argentinos en diferentes oportunidades, en las provincias de Córdoba, Santa Fe y La Pampa (allí ocupó el tercer escalón del podio). Nunca abandono en las competencias y supero la adversidad con gran tesón y mentalidad ganadora. Quizás su carrera más difícil fue el día, que a muy pocas horas de la pérdida de su padre, disputó una prueba en Rosario, con el dolor y la tristeza aún, pero dando ejemplo de compromiso, lucho hasta llegar a la meta. Hoy recuerda con emoción ese difícil momento. Tampoco deja de mencionar a Jovino Pacheco y Belfor Torres entre sus adversarios, y otros tantos.Al cierre de la charla, Palma nos sentencia: “todos mis objetivos los cumplí, hoy con 75 años, tengo mi familia y disfruto de mis nietos (6), no dependo de nadie sino de mi propio trabajo, por eso reclamo que la palabra empeñada se concrete con realidades, mejor que prometer es hacer.”
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