Vientos de esperanza - La Comisión de Actividades Infantiles consiguió otro triunfo importante ya que venció por 2 a 0 a Tiro Federal de Rosario, rival directo en el tema del descenso. Es el segundo triunfo consecutivo como local. Por la tercera fecha de la Reválida del Torneo Federal “A”, el “Azzurro” convirtió un gol en cada tiempo debido a que Rodrigo Linares concretó a los 18’ y Jesús Molina amplió a los 60’. Los rosarinos terminaron con diez jugadores por la expulsión de Elías Cantero a los 86’. En la próxima fecha el equipo comodorense jugará otra “final” cuando visite a Independiente de Chivilcoy.
En una tarde en donde el temporal de viento fue protagonista principal, con ráfagas fuertísimas que impidieron el desarrollo de juego, la CAI sumó de nuevo como local ya que tuvo dos virtudes fundamentales. Una fue aprovecharse de Eolo y provocar un error del arquero visitante para convertir el 1 a 0. La otra fue beneficiarse de su mejor momento, en el arranque del complemento, y liquidar el pleito para terminar con tranquilidad un partido con un oponente directo en el asunto del descenso.
El inicio fue trabado y cortado, obviamente por la condición climática desfavorable. La pelota estaba más afuera que adentro de la cancha. Además hubo algo de polémica en los primeros minutos por una jugada en donde el arquero visitante sacó desde su arco, el balón volvió por el viento y el “1” la retomó. El árbitro cobró correctamente tiro libre indirecto adentro del área porque ningún compañero la tocó, pero antes no advirtió una falta de Linares cuando el portero saltó a capturarlo. Algunos jugadores visitantes le protestaron eso al colegiado y otros se recriminaron entre ellos, esa fue una señal de lo que sucedió al final. Para completar, hay que resaltar que la ejecución terminó en la nada.
En ese lapso, CAI, con Eolo como aliado, estuvo mayoritariamente en campo ajeno y generó desde larga distancia sin puntería. Hasta que a los 18’ Gaitán giró en tres cuartos, tuvo tiempo, espacio y, entrando a la medialuna, pateó a media altura. Dianda puso sus manos, el esférico bajó, y el “1” parecía tener todo controlado en dos tiempos. Pero la tercera fue la vencida y ahí fue donde Linares pellizcó la redonda, se la llevó y convirtió el 1 a 0 sin oposición alguna. Fue un gol de optimista para el delantero, que marcó por primera vez en su regreso.
Con la adversidad en el resultado, Tiro Federal aplacó el hostigamiento del local y pudo tener un poco más el balón. Y estuvo cerca de empatarlo a los 22’ con una subida de Chitzoff por la derecha. El lateral la cambió de lado perfectamente para Fondacaro y el “10” falló en la “palomita” porque su frentazo dio en el costado externo de la red. Lo siguiente fue equilibrado, con una mínima superioridad de los rosarinos. Eso sí, sin crear peligro en la portería de Ronco. En oposición, el “Azzurro” siguió probando con disparos lejanos y la más nítida fue un anticipo de Leguiza en la mitad y el posterior remate que hizo volar a Dianda.
La etapa inicial se fue y, a la vuelta del descanso, la Comisión de Actividades Infantiles mostró su mejor faceta. Es que empezó a gestar asociaciones por la izquierda, lugar predilecto para dañar. Cáceres, Gaitán, Linares y Molina entraron en sintonía y produjeron cosas interesantes. Tal es así que a los 12’ avisó con un contragolpe que Linares la jugó al medio para Reynoso. A metros de la medialuna, Lucas la abrió a la izquierda para Molina, quien la cruzó toda para la llegada de Cáceres. Casi en el fondo, el “11” la atrasó para la aparición en diagonal del que la había armado. La referencia es para el “9”, que resolvió con un remate alto que rozó en un defensor y se fue al córner.
Sólo pasaron tres minutos cuando Gaitán tomó la redonda en el costado izquierdo. “Coco” se metió en el área y, con dos enormes amagues, le hizo un nudo a su defensor. El ex Ferro ganó el callejón final y se la pasó a Linares en el rectángulo chico. Ahí la jugada se ensució un poquito por la intervención de Dianda, pero, de igual forma, el ex Argentinos Juniors logró pasársela a Molina, quien en soledad anotó el segundo tanto de la tarde para la CAI. Y con esa conquista, prácticamente, se terminó el encuentro. Porque durante el resto el local lo controló y no sufrió. Mientras que, la visita no pudo ni supo atacar. Es más, las malas siguieron por la infantil expulsión de Cantero, quien le pegó un codazo innecesario a Molina y vio la tarjeta roja.
MINUTO 91
vestuarios complicados.- Dos situaciones complicadas sucedieron en la zona de vestuarios del Estadio Municipal Comodoro. En el entretiempo los jugadores locales se fueron discutiendo fuertemente e incluso en los vestuarios hubo otro encontronazo. Pero lo peor se produjo tras el pitazo final cuando los jugadores de Tiro Federal se metieron raudamente al vestuario y se escucharon insultos. La cosa pasó a mayores porque hubo algunos golpes. ¿Será que la situación de pelear por el descenso altera los ánimos?
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“Era un rival directo y había que ganar como sea más allá del clima. Gracias a Dios se nos dio y fueron tres puntos muy valiosos. Con el viento se hace imposible jugar. Por ahí intentas jugar pero te das cuenta que no se puede y no te queda otra que buscar a los delanteros e ir para arriba. Se hace mucho más fácil intentar jugar con el viento en contra que a favor, y en el segundo tiempo jugamos bien por momentos. En el segundo gol nos asociamos y pudimos lograr este triunfo tan ansiado”. (Lautaro Cáceres, volante de la CAI y figura del partido).
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“Primero uno está contento por el resultado que obtuvimos. Pero realmente con este viento no se puede jugar. En el primer tiempo, mediante a tiros desde larga distancia, intentamos provocar errores y así sucedió. En el segundo tiempo pudimos jugar un poco mejor, tuvimos dos o tres chances y una la convertimos”. (Armando Tula, DT de la CAI)
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“Este triunfo vale más que tres puntos porque era un rival directo. Teníamos que jugarlo como una final y así se jugó. A pesar del viento que perjudica a los dos equipos y que en el segundo tiempo nos tocó a nosotros en contra, supimos manejarlo bien y por suerte ganamos. Era imposible jugar, aunque ellos estaban más fastidiosos que nosotros. Lo que más quería era hacer un gol y lo pude concretar. En el segundo se la pasé a Jesús (Molina), por suerte pudo convertir y ganamos”. (Rodrigo Linares, autor del primer gol de la CAI).
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