Los que el viento nos dejó - La ventosa y merecida victoria del alviberde dos a uno ante el rojo coloradense, y trepar en soledad a la tercera ubicación en la general. Jorge Olguín de penal y el uruguayo Gonzalo Nieres, los tantos del ganador, Joaquín Curuchet el descuento de la visita.
Soy consciente y lo admito, que la siguiente afirmación, se granjeará más rechazo y desazón, que aprobación de quienes con justa razón, por conocer el paño meteorología de este lugar de la Argentina, sostendrán que con semejante tormenta de viento, se puede jugar al fútbol.
En todo caso, las disculpas del caso.
Pero democrática y respetuosamente, disiento con esa interpretación, en virtud que en lo personal, considero, que la esencia del juego propiamente dicha se distorsiona. Siendo una prueba irrefutable, el balón, más por el aire que por la superficie del sintético, por más esfuerzo que hicieron los muchachos de uno y de otro.
Para quienes de pié, junto mis palmas y los aplausos a rabiar.
Por su vocación de servicio, y su espíritu inclaudicalbe.
Con viento en contra.-
La rotación del viento intenso que no supo de pausa al cabo de los noventas minutos. Sopló en dirección hacia los tres palos, que de manera alternada defendieron a espaldas de San Martín, Lucas Contreras del local, y el “Vasco “, Edgardo Iturburu—de gran actuación- en la etapa complementaria.
Según las indicaciones del manual, de cómo jugar con viento en contra, pelota al ras del piso y pases cortos.
Evitar la rifa el pelotazo, porque el envión del aire en movimiento, como define la geografía al viento. Con fuerza y con peligro de gol te la devuelve al arco propio.
Gran parte de ese cuadro de situación padeció el local, que de manera precisa, no la podía sacar de su sector.
Y por ende gran parte del desarrollo de esa primera mitad, se jugó en campo boxinguista. En absoluto, por una supuesta superioridad del modesto equipo coloradense, sino por el efecto viento, el cual, envolvió al golero Contreras en dos situaciones de apremios. En que fallo, y en una de ellas, derivó en la apertura del marcador.
En la anterior, no pudo retener, y casi paga en efectivo.
Este tipo de escaramuzas en encuentros, jugados bajo esa condición climatológica, se prestan para estas vicisitudes protagonizados por los jugadores, a quienes por una elemental y justa razón de sensibilidad, no se los puede imputar como error cometido.
Sin embargo- Las más claras y escasas situaciones para abrir el marcador, fueron para el local.
Quien en el minuto siete, tras gran habilitación ente líneas de Carlos Julián García, para el veloz Lucas Soto, que en velocidad supera su marca, encaró en diagonal al golero visitante, pero su remate quedó en poder del uno coloradense.
Otra combinación ente ambos, en calidad de aproximación ofensiva.
Casi sobre cartón, en acto seguido, lo que aludíamos líneas arriba, el esférico que se le escurre a Lucas.
Ante la atropelladla del delantero, Emiliano Jofre.
Centro el jugador técnicamente más dotado en la visita. Jonathan Churruchel, cabezazo del central Jhonatan Furg, por arriba del larguero.
Orillando los 23, perfecta habilitación del diez Luís Vidal, testazo de Lucas Soto, y cuando el balón había superado al arquero Edgardo Iitiruburu, el viento se interpuso, malogrando otra clara situación de gol del alviberde
La desventaja de jugar con viento en contra, conspiraron contra la planificación táctica prevista y ensayada entre semana, por los dirigidos por Carlos Padín, tornándosele cuesta arriba de hacerse del baló en mitad de cancha. Sector sobre el cual, como en anteriores presentaciones, ocuparon los doble cinco, Milton Blanco, que no solo quita, sino que la entrega redonda.
El despliegue de Germán Villarino, y el permanente sobre su andarivel, del ágil Jhonatan Morán, que con un par de envíos de media distancia, dejó registrada su participación ofensiva de su equipo.
Algunos destellos de Luís Vidal, y el voluntarismo ofensivo de Lucas Soto y de un Julián García, que no entró tanto en juego al cabo de la primera mitad.
Zafó a las 26’, Milton Blanco de una dolencia que lo obligó a abandonar por unos minutos el campo de juego, pero por suerte pudo continuar.
En el registro de lo más sustancioso que deparó el ventoso primer tiempo se sumó un disparo de media distancia intrascendente del volante Adrián Sandoval.
Colorado el diez-
Deficiente saque del uno boxinguista Lucas Contreras, que le queda servida, al diminuto volante ofensivo de la visita, Joaquín Curuchet, que con envio al ras del piso y a la izquierda del uno riogalleguenses, enmudece a todo Rivadavia y Provincia Unidas.
Ante la sorpresa generalizada, cero-uno, y a barajar de nuevo.
La reacción de Boxing, que no se hace esperar, y con todo procurar igualar antes de la finalización del primer tiempo.
Magnifica combinación entre Blanco-Villarino- Soto, que termina en el fondo del arco visitante, pero anulado por off-side.
Casi de inmediato, en una de la escasas vacilaciones del uno coloradense, casi se le cuela un envió cruzado del nueve Carlos Julián García.
Sobre el final de la etapa, afuera lesionado el 7 Julián Benítez, y adentro, el joven Antonio Erbure.
Lo acorraló de entrada-
El local al visitante, favorecido con el viento a favor. Tratar de empatar lo más pronto posible, y a partir de allí, administrar energías ofensivas, en pos del objetivo, que no era otro, que los tres puntos en casa. Y escalar posiciones, en la Zona Sur Número uno, del Federal “B”.
Con un dispositivo por demás ofensivo el entrenador, metió mano y se la jugó con el ingreso del uruguayo –goleador indiscutido del equipo- Gonzalo Nieres. En reemplazo del lateral Alan Saldivia.
Pasando a jugar con línea de tres en tres en el fondo.
Con Federico Villar—se sumó y bien al ataque, no solo e pelota parada- Jorge Olguín-de gran segundo tiempo-
Y el siempre cumple de Mauro Fuente Alba.
Y por otro lado, agregando un delantero más en cancha, a los ya existentes, Lucas Soto y Carlos Julián GARCÍA.
Modificación que comenzó a redituar rápidamente, a pesar que la infracción sobre uno de los costados del área grande del “vasco” Iturburu, se la cometieron al “flaco” Villar.
Al humo se le fueron al árbitro Eduardo Raúl Pagani, reclamando la inexistencia de la falta.
Que si bien dio acuse de recibo de la protesta, sostuvo la decisión, que con calidad y precisión, canjeó por gol “el cholga” Olguín. Al ras del piso y a la derecha de un arquero, que a pesar de adivinar el costado, en donde direccionó el central de Boxing, el remate, no pudo evitar con su estirada.
Ahora a definir-
Uno a la distancia imaginaba la peormente gesticulación del entrenador del loca, que con la ansiedad, pasión con que vive cada encuentro, caminaba de un lado al otro.
Tácita indicación impartida desde el banco, que como una suerte de guante recogieron sus dirigidos, para ir con determinación, en busca del segundo tanto.
Casi olímpico-
Si el registro personal no me desaíra, a la salida de tres córners, estuvo a punto de convertir bajo esa modalidad tan difícil por cierto, el centro Jorge Olguín.
En la primera, la pelota daña el larguero, y las dos restantes, el arquero la tiró por arriba del techo de la valla.
Y hubo más–Situaciones para ampliar el marcador. Furibundo remate De Julián García, que el uno manotea al córner.
Dentro de este rosario de llegadas con posibilidades, el destacado fue el uruguayo Gonzalo Nieres, que en la segunda o tercera pelota que tocó, lo tumbó al uno visitante con un fortísimo remate que el uno, a esa altura del partido, había enviado al córner más de una decena de pelotas.
En la próxima no falló, y con gran intusión, fue a buscar una descarga a espaldas de los dos centrales visitantes. Rodríguez y Furg, y con categoría charrúa, cruzó la pelota a media altura y a la derecha del arquero, para arrancar el grito pelado de todo.
El ansiado desnivel era un hecho, y de ahí en más, era cuestión de conservar el orden, la concentración y tratar de ampliar la diferencia. A efectos de no pasar sobresaltos.
El rojo de Río Colorado, al igual que a Boxing en la inicial, le costaba hacerse del balón, he insistió con pelotazos, arrimar peligro hacia la ciudadela de Lucas Contreras.
Y que sobre el final, angustió al local, con un envío cruzado del central Rodríguez, que a medias controló Contreras, y el once Antonio Izaguirre, levantó sobre el horizontal.
En respuesta a esa situación de ataque, casi moja nuevamente el “cholga” Olguín de cabeza.
En lo que a cambios se refiere, en Boxing, además del ingreso de Nieres por Saldivia, completaron el cuadro Germán Burgos por Lucas Soto y Carlos Arévalo en lugar de Carlos García.
Recuperación del Boxing, que le permite ocupar con 19 unidades la terceracolocación.
CARLOS DIBENEDETTO
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