La proyección cinematográfica de "Hands of Stone" se realizó ante la impaciente espera de invitados, amigos, medios y Jonathan Jakubowicz, productor de la cinta. Como era de esperarse, la mayor estrella de la noche fue el propio Durán quien desfiló por la alfombra roja muy bien ataviado. El exboxeador departió de buen humor y animado con los invitados a su película.
La cinta, de hora y media, muestra cómo Roberto Durán quien, a pesar de su vida desordenada e indisciplinada, logró ser por cuatro décadas un fenómeno del boxeo. Se preguntarán cómo logró todo eso, si su diario vivir estaba marcado por alcohol, parrandas y mujeres. Bueno, sencillamente porque cuando decidía entrenar lo hacía con voluntad, fuerza y dedicación. La participación de Edgar Ramírez como Roberto Durán encajó superbién el personaje. Tanto en momentos de gloria como de derrota. El papel de Ana de Armas como Felicidad Iglesias mostró ser una mujer de carácter y manipuladora, ya que sabía qué hacer para empujar a Durán a ganar las peleas.
La cinta muestra a un Durán interpretado por el actor venezolano Edgar Ramírez, acordándose siempre de su gente de El Chorrillo, pues repartía comida y hacía fiestas.
Durante del desarrollo del "film" también hubo escenas de sexo, y palabras obscenas, que siempre han caracterizado a "El Cholo". Al finalizar la proyección, el comentarista deportivo Juan Carlos Tapia indicó que le pareció extraordinaria, que se refleja mucho la vida de Durán. Solo que no se puede complacer al público que pide más detalles, ya que en hora y media no es fácil resumir una vida de más de 33 años.
Por su parte, el director Jonathan Jakubowicz mencionó en una entrevista televisiva, que la película no hubiera tenido ningún chance de ser realizada si no hubiese sido por la pasión que tiene el país por la historia de Roberto Durán.
"Después de tantos años lo logramos.
Es uno de los lanzamientos más grandes para una película latina en toda la historia del cine. La primera vez que Juan Carlos Tapia vio algunas escenas de la película me dijo que aquí el negocio iba a ser vender 'kleenex' en la salida de los cines, porque es tan emocional la película, que es muy probable que más de uno suelte una lagrimita en el cine", dijo Jonathan Jakubowicz.
Por panamaamerica.com.pa
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