Los Juegos Olímpicos disputados en tierras brasileras llegaron a su fin, un total de 286 púgiles, entre hombres y mujeres se dieron cita en las instalaciones del Pabellón 6 de Riocentro en búsqueda de un sueño, lograr un podio para llevar al boxeo de su país, a lo más alto del deporte mundial.
Cientos de aficionados se acercaron en torno al cuadrilátero, desde el día 6 de agosto hasta el domingo 21 del mismo, con el fin de observar como los 286 sueños olímpicos de 76 países, daban el todo de sí para avanzar paso a paso en una competencia dura.
En el caso del boxeo masculino, diez fueron las categorías donde los boxeadores compitieron:
Peso minimosca (46–49Kg).
Peso mosca (52Kg).
Peso gallo (56Kg).
Peso ligero (60Kg).
Peso semiwelter (64Kg).
Peso welter (69Kg).
Peso medio (75Kg).
Peso semipesado (81Kg).
Peso Completo (91Kg).
Peso supercompleto (+ 91Kg).
Por su parte las mujeres sólo compitieron en tres categorías:
Peso mosca (48–51Kg).
Peso ligero (57–60Kg).
Peso medio (69–75Kg).
El equipo argentino:
El desempeño del equipo nacional fue dispar. El equipo, conformado por Alberto Ezequiel Melián, Yamil Peralta, Ignacio Perrín, Alberto Palmetta, Fernando Martínez y Leandro Blanc no pudo lograr ninguna presea para el país, hecho que no ocurre desde los Juegos Olímpicos desarrollados en Atlanta 1996, cuando el mendocino Pablo Chacón se alzó con la medalla de bronce y ultima presea para un púgil argentino en un torneo de esta talla.
Pero a pesar de esto, se pudo observar destellos de buen boxeo, como el brindado por el cordobés Alberto Melián, sobre todo en el combate correspondiente a los octavos de final ante el tunecino Bilel M´ Hamdi, donde Impacto mostró un boxeo inteligente y sin fisuras, a pesar de la incidencia que determinó la conclusión temprana de la contienda.
Otro pugil que mostró un buen nivel fue el debutante Fernando Martínez, en la categoría mosca (52 kilogramos), el oriundo de Ciudad de Buenos Aires tuvo un muy buen combate ante el búlgaro Daniel Asenov, aunque para los jueces de la contienda dieran por ganador por fallo dividido al europeo.
Justamente el tema arbitral estuvo en el ojo de la tormenta en estos Juegos de Río 2016. Precisamente la Asociación Internacional de Boxeo Aficionado (AIBA), emitió un comunicado donde explicó que se había examinado todas las decisiones en los combates, encontrando que algunas de las contiendas las decisiones del puntaje de los jueces no estaban en el nivel esperado.
Un caso llamativo fue observar al púgil irlandés, y campeón mundial de peso gallo, Michael Conlan, descargándose frente a las cámaras y micrófonos, luego de ser derrotado, en un fallo controversial, por el ruso Vladimir Nikitin.
Como dijimos en un principio Rio 2016 llegó a su fin, y la antorcha comienza su recorrido hacia tierras niponas. Tendremos que esperar cuatro años para poder volver a observar nuevas contiendas, nuevos sueños olímpicos de diferentes púgiles, que volverán a combatir para llegar a lo más alto del boxeo olímpico, como en otras épocas de nuestra historia lo lograran púgiles de la talla de Cassius Clay en Roma 1960, Joe Frazier en Tokio 1964, Sugar Ray Leonard en Montreal 1976, Oscar de la Hoya en Barcelona 1992.
Nos reencontraremos en Tokio 2020, para seguir viviendo lo mejor del cuadrilátero olímpico.
Por vavel.com
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