EL CONJUNTO COMODORENSE VOLVIO A FRACASAR EN EL MOMENTO MENOS INDICADO - La CAI dejó pasar el tren de regreso a la Primera B Nacional una vez más. La era Rebottaro finalizó 2014 de la manera menos esperada con la eliminación el domingo en el estadio municipal de Kilómetro 3 frente a Gimnasia y Esgrima de Mendoza, en el partido revancha por la tercera fase del torneo Federal A.
Por: Carlos Alvarez
Una postal que vuelve a repetirse. La CAI perdió el tren de regreso a la B Nacional.
El tren volvió a pasar para la Comisión de Actividades Infantiles y el conjunto comodorense se bajó antes de tiempo para volver a la Primera B Nacional. El equipo de Andrés Rebottaro no pudo con Gimnasia y Esgrima de Mendoza el domingo en el estadio municipal de Kilómetro 3, y cayó en el resultado global 2-1. El golpe volvió a ser duro, muy duro para el conjunto comodorense que no logra encontrar la fórmula para regresar. Estuvo cerca en la fase clasificatoria pero cuando dependía de sí mismo, perdió ante Deportivo Madryn en el “Coliseo del Golfo”, un partido clave, a dos fechas del ascenso cuando lideraba y dependía de sí mismo. Herido, pero no abatido siguió en la pelea, pero los playoff de ida y vuelta en colectivo para definir dos ascensos más, lo dejaron con las manos vacías al conjunto comodorense.
El “azzurro” quedó a un paso del ascenso en el torneo que finalizó en la primera parte del año, al llegar a las semifinales en la disputa por el segundo ascenso, tras la consagración de Santamarina de Tandil. La CAI cayó en la eliminatoria ante Juventud Unida de San Luis, equipo que luego perdió la final frente a Guaraní Antonio Franco de Misiones.
En la anteúltima fecha de ese Nonagol, al caer ante Santamarina de Tandil, resignó las posibilidades de ascenso directo. Luego volvió a revivir en los cruces, aunque no le alcanzó para jugar la final que quedó en manos de Guaraní de Misiones.
El DT rosarino Andrés Rebottaro, que llegó a Comodoro Rivadavia en diciembre del año pasado, retomó la responsabilidad en junio tras unas idas y vueltas con la dirigencia, y siguió al frente del equipo con el mismo objetivo: ascender. Sin embargo volvió a quedar muy cerca de la orilla luego de recorres miles de kilómetros.
De nada sirve la fría estadística que afirma que de 18 partidos, ganó 10 y perdió 4, cosechando cuatro empates, porque el objetivo no se logró. Será el cuerpo técnico y la dirigencia la que evaluará cuando se tranquilicen las aguas qué se hizo mal y qué fue lo positivo de una temporada donde la CAI volvió a quedar en las “puertas del cielo”.
La última campaña tuvo al arquero Mauro Leguiza como uno de los pilares de la campaña, donde atajó penales en partidos claves pero no alcanzó. Como tampoco alcanzaron el aporte goleador y la experiencia de Mauro Villegas que sumó 8 goles, pero en los últimos siete encuentros (definitorios) se quedó sin fuerza y no gritó.
A la CAI sólo le queda este año jugar por la Copa Argentina, y pensar en 2015 donde no habrá siete ascensos y el juego será diferente. Por ahora la mira está en Liniers de Bahía Blanca por el certamen federal (5ta eliminatoria Zona Interior) el jueves 11 de diciembre en el estadio municipal de Kilómetro 3, desde las 17.
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