La edición 37 del Rally que se realiza en Córdoba será acompañada por una multitud - ENTRE LUCES. Hayden Paddon avanza con su Hyundai en el circuito trazado en la zona del Centro Cívico. El británico registró el 7° tiempo en la exigencia nocturna, que siguieron casi 50.000 personas.
En aquel lejano 1984, por primera vez el Rally Mundial llegó a tierras cordobesas. Entonces, el romance comenzó y, por lo que dicen los protagonistas, perdura. “Se agradece ver tanta gente a los lados mientras se compite”, dijo Daniel Sordo. El español no deja de sorprenderse por la efusividad de la gente en Córdoba, donde se disputa la cuarta fecha del calendario. La segunda del Campeonato Argentino acompaña la cita.
El crédito no pueden llevárselo sólo los dueños de casa. Anoche, para presenciar el súper especial en la capital cordobesa se repartieron 50.000 entradas. Entre quienes las adquirieron hubo gente de Santa Fe, Entre Ríos, Corrientes, Salta, Jujuy, Tucumán. Uruguay, Chile, Brasil y Paraguay son los países de los que también llegaron simpatizantes. Todos se unieron para crear un universo aparte de todas las fechas, como lo siente Sordo.
“El público acompaña mucho”, agregó el europeo. Y es que es para destacar: el shakedown, una prueba libre en la que los pilotos simplemente testean los autos y que ninguna incidencia tiene en el resultado final, tuvo una gran cantidad de gente observando desde muy temprano. En lo deportivo, aunque el pie de los pilotos es mezquino para acelerar y los navegantes “leen” la hoja de ruta con mucha cautela, fue suficiente para dejar en claro que lo que se vivirá desde hoy (ver nota aparte) será muy parejo.
En ese trayecto, que estuvo demorado porque se socorrió a un espectador que falleció por un infarto mientras era trasladado a Carlos Paz, las cinco primeras máquinas del Mundial no se distanciaron más allá del segundo. El finlandés Jari-Matti Latvala fue la referencia con 4’02”. Un poco más espaciadas fueron las distancias entre los autos del Argentino, donde Federico Villagra fue el más veloz con 4’45” 03/1000.
No llama la atención la tremenda distancia de más de 40” entre una categoría y otra. Menos que, de los 69 autos que largarán por el campeonato local, sólo 16 hayan optado por la prueba para cuidar sus autos. Sucede que las máquinas del Mundial “funcionarán” como un condicionante para los locales. Los suelos quedarán desgastados y rotos tras su paso, otro desafío a superar, además de los duros caminos que entre mañana y el sábado deberán transitar conjuntamente. Así que los miles de espectadores tendrán mucho para entretenerse. También deberán saber comportarse porque las consecuencias pueden ser muy severas.
Si bien Argentina superó con creces en 2016 el informe lapidario de 2015 (“inaceptable comportamiento” decía el comunicado de la Federación Internacional de Automovilismo) hoy y en la próxima edición, seguirá bajo observación.
Tanta es la necesidad de sacar 10 en este aspecto que desde la organización se lanzó el hastag #unrallyseguro buscando también que la fiesta del Mundial tenga una merecida continuidad en tierras cordobesas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario