Una fecha especial, recordando tantos episodios, desde el primer día, pensando en que momento me atrapa la pasión, y hasta donde llega el amor por la radio.
Desde llegar con tu voz, una voz que a vos no te gusta, pero que a los demás si, y el contenido que atrapa al otro, en este juego de palabras.
Lo del Tano fue tremendo, porque tanto tiempo cubriendo el deporte, especialmente el fútbol, y llega un mundial entendés ¿Que hacemos? en esta circunstancia donde todo el mundo sigue el mundial, y era como que hablar de otra cosa no tenia sentido.
Le digo al Tano (Carlos Di Benedetto), una persona brillante, con una imaginación fantástica, y mas para la tribuna futbolera. "Carlitos, y si te vas a Alemania" ponele la cara, me miro y me dijo, estas loco, no tengo un mango. No, pero con la radio podemos viajar, podes ser nuestro corresponsal en Alemania, y así fue como estuvimos en el Mundial.
Las cosas que narraba el Tano telefonicamente, eran atrapantes, hasta el punto que muchos me preguntaban si era verdad que estaba en Alemania o no. Y muchos entendía que no, porque lo conocían y sabían de sus problemas a la hora de meter mano al bolsillo. La cobertura fue un éxito.
Y así, hay un montón de anécdotas, pero también llegan esos momentos en que la utilizacion de un micrófono es peligrosa, y hay que ser responsables, porque pasas a ser un referente o un nexo que el oyente usa para hacer llegar su mensaje.
Por dar ejemplos hasta el día de hoy, la pasión por la radio, el efecto que provoca en la audiencia la transmisión de un partido de fútbol, o una pelea es irreemplazable, y el rsultado que vale es el que cada uno le pone. Para vos gano tu equipo, para el contrario el suyo, y para el relato, el que ellos vieron.
Recuerdo la frase "lo dijo la radio"
Cuando muy temprano se encendía para escuchar las noticias, los famosos mensajes para el hombre de campo, algún accidente, nacimientos, fallecimientos, la hora, el clima, como una caja de pandora, la radio era casi todo.
En estos tiempos, compartir con los que la inventaron, con los que la llevaron a remotos lugares, los que la amaron y la aman, y esas voces que encierran un misterioso poder en la imaginacion de cada uno de nosotros, cuando no conocemos a los dueños de las mismas, y por supuesto de la mano de la música, un socio incomparable, y que forma parte de nuestra tradicional mañana folclórica, los tangos, las canciones románticas, el recuerdo, recorrer el país por medio de cada estilo y trasladarnos mas allá a España, Italia, y otros lares que componen un país de inmigrantes, como el nuestro.
De la caja grande de madera, a las pilas, la portátil, despues la metimos en el auto, en el celular, hasta llevarla con nosotros a todos lados. Viva La Radio che!!!!
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