EL SIMBOLO DEL EQUIPO NACIONAL DE COPA DAVIS

DIO A CONOCER AYER SU DECISION - DAVID NALBANDIAN - Argentina pierde a su tenista más “copero” con el retiro de Nalbandian. "El hombro que me operé hace seis meses no me respondió bien. Y así no puedo competir al nivel del circuito ATP. Es un día difícil porque estoy diciéndole adiós a una actividad que me dio tantas cosas. El tenis es el deporte que me dio todo”, admitió el cordobés, ganador de once títulos ATP.

El tenista cordobés David Nalbandian, de 31 años, ganador de once títulos ATP y símbolo del equipo argentino de Copa Davis, anunció ayer su retiro del circuito profesional.

“El hombro que me operé hace seis meses no me respondió bien. Y así no puedo competir al nivel del circuito ATP. Es un día difícil porque estoy diciéndole adiós a una actividad que me dio tantas cosas. El tenis es el deporte que me dio todo”, expresó Nalbandian en una conferencia de prensa que brindó en La Rural, donde en noviembre jugará una exhibición con Rafael Nadal.

David contó que “la Copa Davis es una espina que no se pudo cumplir, pero se dio así. Faltó ganar dos puntos y nada más. Estuvimos muy cerca por muchos años. Argentina peleó siempre cuartos, semifinales o la final, algo que no pasaba desde (Guillermo) Vilas y (José Luis) Clerc. Ganamos series muy duras y lamentablemente nos faltó dar la estocada final”.

“Las imágenes que más me hacen lagrimear son las de Copa Davis. Esa pasión de la gente y el clima no lo viví en otro lado. Hasta el final di todo, me entrené con los chicos antes de que fueran a Praga, pero no llegué”, explicó el cordobés, nacido en Unquillo, luego del video con imágenes de su carrera que compartió con la prensa.

Entre los momentos en que más cerca estuvo de la “Ensaladera de Plata”, Nalbaldian recordó la final de Mar del Plata 2008 y cuando “fuimos al quinto punto de la serie con Rusia, en 2006”. 

“Si veo en mi carrera, la Davis es lo que más disfruté. Aunque no puedo dejar de acordarme de la final de Wimbledon 2002, porque fue un gran salto para mi carrera. Estaba 32 o 33 en el ranking y salté al top ten, donde me mantuve por años. Y tampoco dejo de lado haber podido jugar el Masters de Shangai”, añadió. 

El de Unquillo logró 383 triunfos y 192 derrotas y conquistó once títulos: Estoril 2002, Basilea 2002, Munich 2005, Masters Shangai 2005, Estoril 2006, Madrid 2007, París 2007, Buenos Aires 2008, Estocolmo 2008, Sidney 2009 y Washington 2010.

Nalbandian, que logró escalar al tercer puesto del escalafón mundial el 20 de marzo de 2006 y acumuló 11.123.125 dólares en premios, no juega desde abril pasado, cuando disputó el punto de dobles junto a Horacio Zeballos en la serie ante Francia en Buenos Aires, por los cuartos de final de la Davis. Su último partido en el circuito fue en marzo, cuando perdió en la primera ronda del Masters 1000 de Miami.

EXHIBICION Y FAMILIA

Oficialmente se retirará luego de las exhibiciones con el español Rafael Nadal (“un crack, un amigo, el 1º del mundo”) en noviembre, en Buenos Aires. Como el serbio Novak Djokovic también vendrá a nuestro país para jugar con Nadal, Nalbandian no descartó “llamarlo para ver si hacemos algo juntos también”.

Consultado sobre su futuro, el ex top ten y actual 231 del mundo aseguró: “Esto es demasiado reciente y duro como para pensar en qué voy a hacer. Hoy no puedo pensar en si algún día quiero ser capitán de la Davis. Por ahora sigo enfocado en recuperar el hombro para la exhibición y disfruto de mi familia, de mi mujer y mi hija”.

Nalbandian, último jugador que quedaba en actividad de la “legión Argentina” que integraron Guillermo Coria, Gastón Gaudio, Juan Ignacio Chela, Mariano Zabaleta, José Acasuso y Agustín Calleri, consideró que “la constancia en este deporte es primordial”.

“En mi camada, me acuerdo que con Coria nos decían que éramos buenísimos. Y nos podría haber jugado en contra pero no nos la creímos. Pensábamos en mejorar día a día. Hay que tener una cabeza diferente porque el circuito es muy duro”, avisó.

Por último, Nalbandian sostuvo: “No me arrepiento de nada de lo que hice en mi carrera. ¿Si hubiese cambiado alguna cosita? Puede ser, siempre uno es autocrítico, pero en la vorágine de esta carrera creo que siempre hice lo que sentí”.